
¿Pensabas que todas las tartas se tomaban de postre? Eso es porque no conocías esta deliciosa tarta de queso salada. Una receta original a la par que sabrosa, para compartir en una reunión de amigos o como plato principal en una comida de domingo en familia.
Estamos convencidos de que esta combinación de sabores y texturas entre las verduras y el queso no dejará indiferente a nadie.
Si quieres saber cómo preparar esta receta, sigue leyendo


Raciones |
8-10 raciones
|
- 350 g de galletas de avena
- 180 g de mantequilla sin sal, fundida
- 2 cucharadas de harina común
- 450 g de queso cremoso entero
- 4 cucharadas de nata para montar
- 2 huevos grandes batidos
- 100 g de queso cheddar maduro, rallado
- 1 cucharada de cebollino picado
- 1 diente de ajo grande, pelado y picado
- 1 remolacha mediana, pelada y cortada en trozos de unos 2,5 cm
- 1 boniato mediano, pelado y cortado en trozos de unos 2,5 cm
- 8 chalotas pequeñas peladas
- 2 apios pequeños, pelados y cortados en trozos de unos 2,5 cm
- 5 dientes de ajo pelados
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- ½ cucharadita de sal
- ½ cucharadita de pimienta negra
- 20 g de rúcula fresca
Ingredientes
|
![]() |
- Para comenzar con la receta precalentamos el horno en modo CircoTherm a 180°C.
- Engrasamos un molde desmontable de unos 20 cm de diámetro.
- Mientras tanto, introducimos las galletas en un procesador de alimentos y trituramos hasta desmenuzarlas por completo. Añadimos la mantequilla fundida y la harina y mezclamos bien.
- Vertemos la masa en el molde y presionamos sobre la base y los laterales.
- A continuación, introducimos en el horno durante 10 minutos para precocer la base. Pasado ese tiempo retiramos del horno.
- La base de galletas se habrá dilatado ligeramente, por lo que, mientras todavía esté caliente, utiliza una cuchara para presionarla de nuevo sobre la base y los laterales del molde.
- Después, introduce el queso cremoso en un bol, la nata y los huevos, y mezcla bien hasta que quede una masa suave. Incorpora el cheddar, los cebollinos, el ajo picado y remueve.
- Vierte la mezcla sobre la base de galletas en el molde.
- Vuelve a introducir en el horno y hornea durante 40-50 minutos hasta que el centro de la tarta esté firme.
- Cuando la tarta esté hecha, retira del horno y recorre con un cuchillo el borde exterior.
- Después, deja enfriar durante una hora aproximadamente.
- Mientras tanto, coloca en una bandeja de horno la remolacha, el boniato, las chalotas, los apios y los dientes de ajo. Rocía con aceite y espolvorea con sal y pimienta.
- Hornea durante 30-35 minutos las verduras hasta que estén doradas y tiernas.
- Transcurrida la hora, desmolda la tarta de queso con cuidado. Coloca las verduras asadas sobre la tarta y decora con rúcula.
- Puedes servirla mientras todavía esté templada o dejarla enfriar por completo e introducirla en el frigorífico antes de servir.

Hoy te proponemos una forma diferente de comer verduras y una forma muy distinta también de tomar tarta. Y combinando ambas, tenemos como resultado esta deliciosa tarta de queso y verduras, nada parecida a las tartas de queso a las que estabas acostumbrado.
¿Te apetece probarla? Ponte manos a la obra y cuéntanos el resultado. Estamos deseando conocer vuestras impresiones.
Te puede interesar…




